La doctora Helene Langevin, experta en neuroquímica y profesora en la facultad de Medicina de la Universidad de Harvard y directora del Centro Osher para la Medicina Integrativa, ha escrito un artículo en defensa de la eficacia de la acupuntura en la web del prestigioso centro académico.
El texto lo ha escrito en colaboración con la doctora Carolyn A. Bernstein, neuróloga especializada en el dolor de cabeza.
Ambas doctoras reconocen que es fácil ridiculizar una terapia oriental con miles de años de antigüedad, que parece más cercana a la magia que a la ciencia, pero aseguran que las evidencias científicas acumuladas a lo largo de los últimos 10 años demuestran que la acupuntura funciona.
La acupuntura es eficaz para tratar dolores agudos y crónicos
Aseguran que solo la acupuntura verdadera (en que las agujas se colocan en los puntos indicados por la Medicina Tradicional China) y no la falsa (se utilizan agujas retráctiles que no penetran realmente en la piel) es eficaz para tratar el dolor de espalda, la artritis y el dolor de cabeza.
Langevin y Bernstein mencionan, por ejemplo, un metaanálisis de 2012 que combinó datos de aproximadamente 18.000 pacientes en 23 ensayos de alta calidad.
El estudio concluyó, prácticamente sin posibilidad de error, que la acupuntura produce efectos reales en el tratamiento de los dolores lumbares, de cabeza y de osteoartritis. Asimismo, que las mejoras fueron cuando menos similares a las de los medicamentos analgésicos no opiáceos más utilizados, con la ventaja de que apenas produce efectos adversos cuando la aplica un profesional capacitado.
La acupuntura también se ha demostrado eficaz para reducir la presión arterial y para mejorar de manera duradera la función cerebral.
Es una alternativa a los medicamentos analgésicos
“La práctica de la acupuntura se ha convertido en una importante opción no farmacológica que puede ayudar a los pacientes con dolor crónico a evitar el uso de medicamentos potencialmente dañinos, especialmente los opiáceos con su grave riesgo de adicción”, escriben las doctoras.
Para ellas se debería reconocer que la acupuntura puede ser “parte de la solución al inmenso problema del dolor crónico y de la adicción a los opiáceos que está afectando a nuestra sociedad”.
“El hecho de que esta solución provenga de una práctica antigua con una base teórica que la ciencia moderna no entiende por completo debería hacerla aún más interesante y digna de nuestra atención”, señalan. “Los médicos deben aprender sobre tratamientos alternativos sin medicamentos y responder a las preguntas y preocupaciones de los pacientes con conocimiento y respeto”.
Fuente: CUERPOMENTE